Este domingo, la reina Isabel II se convierte en la única monarca británica en cumplir 70 años en el trono. No solo eso, también en el reinado más longevo de Europa.
Este récord llega amortiguado por la ausencia de su difunto marido, varios polémicos conflictos familiares y una salud debilitada.
En aquel año, 1963, se llevaba a cabo la coronación de su majestad, Isabel II, fue vista por millones de personas en vivo a través de la televisión nacional, destacando como uno de los primeros eventos televisados más esperado.
En estas siete décadas de reinado, la soberana ha sido testigo de grandes acontecimientos, desde las dificultades de la posguerra hasta la pandemia del COVID-19, pero en el camino supo adaptarse a los cambios, como el famoso “annus horribilis” de 1992, la separación de los príncipes de Gales, la muerte de Diana de Gales en 1997.
Es la primera vez que la reina Isabel II, de 95 años de edad, aborde su llegada a la corona sin Felipe de Edimburgo.
