El nĂşmero de vĂctimas mortales por el terremoto de magnitud 7,6 que golpeĂł el oeste de JapĂłn el pasado 1 de enero, ascendiĂł a 110, mientras que 211 personas siguen desaparecidas.
La ciudad más afectada fue Wajima, donde se reportaron 55 decesos, seguida de Suzu con 23 fallecidos, y otras localidades también sufrieron pérdidas.
Aunque algunas áreas permanecen aisladas y alrededor de 30.000 evacuados esperan regresar a sus hogares, la respuesta de emergencia se intensificó con un mayor despliegue de personal policial y militar.
El sismo, considerado el más fuerte registrado desde 1885, generó una alerta de tsunami que fue levantada posteriormente. Además, se han registrado numerosas réplicas, incluyendo un sismo de magnitud 5,3 en la mañana de este sábado.