Mohamed al-Bashir fue designado como primer ministro interino de Siria, ocupando el cargo hasta marzo de 2025, según anunció la televisión estatal siria, ahora controlada por las fuerzas rebeldes que derrocaron al régimen de Bashar al-Asad.
Esta transición se formalizó en una reunión del Consejo de Ministros, donde se realizó el traspaso de poderes del antiguo gabinete a un nuevo gobierno, que tendrá una duración de tres meses.
Al-Bashir, quien anteriormente lideraba el “Gobierno de Salvación” en Idlib, recibió la responsabilidad de gestionar el gobierno provisional y se comprometió a abordar asuntos de seguridad, incluyendo la disolución de las autoridades de seguridad y la anulación de leyes relacionadas con el terrorismo.
Esta nueva administración se formó tras una ofensiva rebelde que culminó con la caída de Al-Asad, quien huyó del país después de más de dos décadas en el poder.
