El paro de transporte público anunciado para el área metropolitana de Asunción, previsto para el 21 al 23 de julio, podría generar un impacto económico severo, especialmente para los trabajadores que dependen del bus para llegar a sus empleos.
Se estima que al menos 200.000 empleados podrían perder su jornal mínimo diario al verse impedidos de acceder a su lugar de trabajo, lo que podría traducirse en pérdidas de G. 22.400 millones por día, sumando G. 66.000 millones en tres jornadas.
El análisis de Enrique López Arce, especialista en empleo, indica que el grupo más afectado es el de menor poder adquisitivo, quienes no tienen movilidad propia y continúan utilizando el bus.
Ante el paro, muchos se verán forzados a buscar alternativas más costosas o, directamente, dejar de intentar llegar a sus trabajos por la lejanía o por lo inaccesible de otras opciones.
Además de los trabajadores, la medida afectará a comercios, industrias y servicios, quienes podrían operar por debajo de su capacidad debido a la falta de personal, generando un efecto en toda la economía.
