La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), junto con la Fiscalía y bajo la coordinación del fiscal Fernando Meyer, llevó a cabo la operación “Tridente” en el barrio Anahí de San Lorenzo, logrando desmantelar una red de microtráfico que funcionaba en varios puntos de la ciudad. Esta organización distribuía drogas principalmente a niños, adolescentes y jóvenes vulnerables, conocidos en la zona como “pirañas”.
El operativo se centró en tres bocas de expendio interconectadas, donde además se reunían consumidores que posteriormente cometían delitos en el área. Durante la intervención, fueron detenidas cuatro personas vinculadas a la red: Rocío Fretes (39), Carlos Santos Acuña (42), Ramona Dominga Rojas (61) y Pablo Sebastián Jara (20).
En el lugar se incautaron 36 gramos de crack, equivalentes a unas 250 dosis, 135 gramos de cocaína, cerca de 300 dosis, un arma de fuego y dinero en efectivo. A pesar de la precaria infraestructura de los inmuebles allanados, se detectó un sistema de monitoreo instalado por los propios implicados para controlar el movimiento en la zona y evitar la presencia policial.
Se confirmó que estos puntos ya habían sido intervenidos en ocasiones anteriores, pero continuaban operando de forma reincidente, lo que evidencia la persistencia del problema en la comunidad.
