Las autoridades uruguayas investigan un atentado ocurrido en la madrugada del domingo contra la fiscala general Mónica Ferrero. Hombres armados dispararon y arrojaron una granada en el patio de su vivienda en Montevideo. Aunque no hubo heridos, el ataque fue interpretado como un intento de intimidación.
El narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, uno de los más buscados de Sudamérica, es señalado como el presunto autor intelectual del hecho. Según medios locales, la acción habría sido ejecutada por una banda criminal vinculada a Marset, como represalia por la pérdida de un cargamento de droga y por investigaciones lideradas por Ferrero en el pasado.
El presidente uruguayo, Yamandú Orsi, expresó su respaldo a la fiscala y aseguró que hay avances importantes en la investigación. Dos personas están detenidas y se encontraron vehículos implicados en el atentado.
Marset, prófugo con alerta roja de Interpol, está relacionado con redes de narcotráfico en Paraguay, Bolivia y Brasil. También es uno de los principales implicados en la operación A Ultranza en Paraguay. Estados Unidos ofrece hasta USD 2 millones por información que permita su captura. Se presume que actualmente se esconde en Venezuela.
