La Guardia Civil de Zamora sigue investigando las causas del trágico accidente ocurrido en la madrugada del jueves 3 de julio, en el que murieron el futbolista portugués Diogo Jota, jugador del Liverpool, y su hermano André Silva. El siniestro se produjo en la autovía A-52, a la altura de Cernadilla, cuando el Lamborghini Huracán en el que viajaban se salió de la calzada.
Las primeras indagaciones apuntan a que el vehículo circulaba a una velocidad superior a la permitida, lo que podría haber contribuido a la pérdida de control. También se investiga la posibilidad de un reventón de neumático, ya que en el lugar se hallaron marcas que están siendo analizadas por los peritos del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil.
Las pruebas realizadas hasta ahora indican que era Diogo Jota quien iba al volante en el momento del accidente. El informe técnico aún no está concluido y será remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Puebla de Sanabria una vez completado.
El siniestro ocurrió cerca de las 00:30, cuando los hermanos se dirigían a Santander, desde donde el jugador tenía previsto embarcarse rumbo a Inglaterra por mar, siguiendo recomendaciones médicas tras un problema pulmonar que le impedía viajar en avión.
