Nicolás Maduro vuelve a estar en el foco de Estados Unidos, esta vez tras nuevas revelaciones del narcotraficante Ovidio Guzmán, hijo del Chapo, quien habría entregado información clave a la justicia norteamericana sobre los presuntos vínculos del mandatario venezolano con redes del narcotráfico.
El periodista mexicano Jesús Lemus Baraja, especialista en crimen organizado, afirmó que Guzmán declaró ante autoridades de EEUU que Maduro mantiene nexos con grupos criminales como el Cártel de Sinaloa, Los Zetas y narcotraficantes colombianos. Estas declaraciones habrían sido parte de un acuerdo de colaboración judicial.
Tras esa información, Washington declaró al Cártel de los Soles —presuntamente dirigido por altos mandos del chavismo— como una organización terrorista. También vinculó al grupo con el Tren de Aragua y otros actores del crimen transnacional.
El Departamento de Estado sostiene que Maduro lidera una red que facilita el tráfico de drogas hacia EEUU y socava la estabilidad regional. Como parte de la ofensiva, el gobierno estadounidense duplicó a USD 50 millones la recompensa por datos que conduzcan a su captura.
Mientras tanto, Caracas insiste en que el llamado Cártel de los Soles es una invención sin fundamentos, y ha llamado a la población a “defender la soberanía ante amenazas extranjeras”.
