El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, acusó a Rusia de cometer crímenes de guerra, en especial sobre la ciudad de Járkov, y solicitó que se le impida el acceso a los puertos y aeropuertos del mundo.
El líder ucraniano, esta mañana, hacía público: “Hoy las fuerzas rusas han disparado brutalmente sobre Járkov con obuses de artillería. Es un crimen de guerra evidente”, añadía que: “Járkov es una ciudad pacífica. Hay zonas residenciales pacíficas, sin instalaciones militares. Decenas de relatos de testigos demuestran que no son disparos perdidos sino una destrucción intencionada. Los rusos sabían dónde disparaban”.
Incluso las autoridades municipales de Járkov han denunciado formalmente nueve víctimas fallecidas y 37 heridos por el impacto de los proyectiles rusos.