El exbanquero uruguayo José Peirano Basso fue condenado por el delito de lesión de confianza y el juez Raúl Florentín, junto con el Ministerio Público, decidió aplicar una suspensión condicional de la pena durante un período de dos años.
Bajo esta suspensión, Peirano no tendrá que cumplir la pena de prisión siempre y cuando cumpla con ciertas condiciones impuestas por el juez.
Una de las condiciones es que Peirano deberá donar G. 150.000.000 a entidades benéficas, con el objetivo reparar el daño causado a la sociedad. Además, Peirano deberá mantener una caución de USD 1 millón como garantía durante el período de prueba.
Durante la audiencia preliminar, la defensa de Peirano argumentó que se habían alcanzado acuerdos reparatorios con algunas de las víctimas del delito, lo cual también fue considerado por el juez.
Los fiscales del Ministerio Público también estuvieron de acuerdo con la suspensión condicional de la pena, afirmando que era una medida justa en este caso. Por otro lado, el juez Florentín también destacó la importancia de la reinserción social del acusado.