La Articulación de Mujeres Indígenas del Paraguay reclamó justicia por la muerte de Valeriana Arce, una adolescente de 13 años hallada sin vida con signos de abuso, y por Celina Martínez Ojeda, joven de 20 años asesinada este mes de abril.
El hallazgo del cuerpo de Valeriana ocurrió alrededor del mediodía del miércoles en la comunidad de Santa Teresita, Departamento de Boquerón. Ambas víctimas pertenecían a pueblos indígenas: Valeriana al pueblo Nivaclé y Celina al Mbya Guaraní.
Mediante un comunicado, la organización denunció que las mujeres y niñas indígenas siguen expuestas a altos niveles de violencia, incluyendo violaciones, femicidios, desapariciones, trata de personas, explotación sexual, y trabajo doméstico en condiciones indignas y peligrosas.
También recordaron la situación de vulnerabilidad que enfrentan especialmente las mujeres y niñas indígenas con discapacidad, en instituciones de acogida, y citaron el marco de protección internacional que insta a los Estados a garantizar sus derechos, como la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer y la Recomendación General 39.
Asimismo, la Articulación advirtió que en los últimos años muchos casos de feminicidios de mujeres indígenas quedaron impunes y aseguró que no permitirán que el caso de Valeriana se convierta en uno más sin justicia.
Finalmente, solicitaron a la Fiscalía General del Estado que actúe con la mayor rapidez para identificar a los responsables. Alertaron que en la comunidad circulan denuncias sobre la existencia de una red no indígena dedicada a captar niñas indígenas con fines de explotación sexual.
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