Una adolescente de 17 años, oriunda de Coronel Oviedo, fue sometida a un trasplante renal con donante vivo en el Hospital Nacional de Itauguá.
La operación fue posible gracias al acto solidario de su madre, de 44 años, quien decidió donar uno de sus riñones para mejorar la calidad de vida de su hija, diagnosticada con nefritis lúpica.
La paciente llevaba casi dos años en tratamiento de hemodiálisis tres veces por semana. La cirugía, la primera de este tipo realizada en 2025 en ese centro de alta complejidad, fue llevada a cabo por un equipo multidisciplinario que destacó el compromiso y la coordinación en cada etapa del procedimiento.