La indignación crece en Coronel Oviedo tras el hallazgo del cuerpo calcinado de María Fernanda Benítez Martínez, de 17 años. Este lunes, un grupo de vecinos arremetió contra la vivienda de la familia del principal sospechoso del crimen, en el barrio Villa del Maestro. El portón trasero fue derribado, se encendieron neumáticos e incluso se escribieron mensajes como “Justicia por Fernanda” y “asesinos” sobre los muros.
El inmueble ya había sido blanco de intento de ingreso forzado el domingo, poco después de que el cuerpo de la adolescente fuera hallado en un terreno frente a la casa. Durante el nuevo episodio de violencia, los vecinos también habrían quemado el cuerpo de un perro que pertenecería a la familia del joven investigado y que fue encontrado junto a la víctima.
Cuando el conflicto escaló, efectivos policiales y del grupo de Fuerzas Especiales llegaron al sitio para contener la protesta. En medio del caos, los manifestantes accedieron a la casa e iniciaron un incendio en su interior. La Policía dispersó a la multitud utilizando balines de goma y posteriormente intentó controlar las llamas con mangueras.
La presión ciudadana también se dirige hacia las autoridades, ya que varios vecinos exigen que los padres del adolescente sospechoso sean incluidos en la investigación. En respuesta a la magnitud del caso, el Ministerio Público resolvió asignar a un nuevo equipo fiscal conformado por Gladys Torales, Fermín Segovia y Gloria Rojas para proseguir con las diligencias.
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