En la ciudad de Escobar, departamento de Paraguarí, la Policía Nacional detuvo a Rosa Agustina Ovelar Contreras, una joven de 23 años, acusada de haber asesinado a su bebé recién nacido. La mujer confesó haber asfixiado al niño y dejado su cuerpo escondido en un yuyal en la compañía Ybyraty.
La investigación comenzó tras el hallazgo de testimonios y evidencias, incluyendo imágenes de cámaras de seguridad que mostraron a la mujer saliendo del Hospital de Paraguarí con el bebé dos días después del parto. Posteriormente, solicitó un traslado por la plataforma Bolt hasta Ybyraty y fue vista en una despensa de la zona.
Durante las diligencias, los investigadores lograron identificar y ubicar a los conductores que la transportaron. Bajo custodia policial, la sospechosa llevó a las autoridades hasta el lugar donde abandonó al recién nacido. En el sitio, se encontraron varios indicios como restos de bolsas de polietileno con impresiones comerciales, un fragmento de pañal y una pinza umbilical con tejido adherido, aunque no se hallaron restos óseos, posiblemente porque fueron consumidos por animales carroñeros.
El Ministerio Público, a través de la fiscal Betti Brítez de la Unidad Penal N.º 1 de Piribebuy, imputó formalmente a la joven madre por homicidio doloso.
