El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) decidió por unanimidad destituir a Nathalia Garcete, jueza de Paz del 2° Turno de La Catedral, por supuesto mal desempeño en sus funciones.
Se le atribuyó a la magistrada una conducta “indolente, descuidada y negligente”, que facilitó la operación de la “mafia de los pagarés”.
La jueza firmó resoluciones sin fecha en 27 expedientes, lo cual derivó en juicios ejecutivos y embargos que perjudicaron el patrimonio y la salud de las víctimas. Este mal actuar comprometió la seguridad jurídica y violó el derecho fundamental de defensa de numerosos afectados.
El ministro César Garay y otros miembros coincidieron en que hubo graves consecuencias por el accionar anómalo de la magistrada.
