Una bebé de 13 meses, Emma, de nacionalidad española, recibió un trasplante multidisciplinar de intestino “en asistolia”, una técnica en la que los órganos y tejidos del donante se mantienen con oxigenación extracorpórea una vez certificado su fallecimiento. Es el primer caso en el mundo.
La intervención quirúrgica se realizó en el hospital público madrileño de La Paz, y fue dada a conocer este martes por el Gobierno de Madrid, durante una conferencia en el que estuvo presente la directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Beatriz Domínguez-Gil, los profesionales médicos del hospital y los padres de la pequeña paciente.
El trasplante se ejecutó mediante una donación en “asistolia”, que consiste en la donación de órganos y tejidos que proceden de una persona a la que se le diagnostica la muerte tras la confirmación del cese irreversible de las funciones cardiorrespiratorias (ausencia de latido cardiaco y de respiración espontánea), órganos que se preservan con un sistema de oxigenación extracorpórea.
Cuando la cirugía es multivisceral, como ha sido el caso de la bebé, suele implantarse el bloque digestivo formado por el hígado, intestino, estómago, bazo y páncreas. Esta es la opción terapéutica a la que se recurre cuando ya no es posible el tratamiento médico.