Un tribunal australiano, compuesto por tres jueces, de forma unánime, rechazó el pedido del tenista serbio Novak Djokovic, quien planteó se anule la decisión del Gobierno de revocar su visado.
La pregunta natural es: ¿Qué se viene ahora para Djokovic? Será deportado, por lo que no podrá defender su título en el Abierto de Australia, que arranca con todo este lunes.
El serbio tenía que debutar en la central Rod Laver Arena frente a su compatriota Miomir Kecmanovic.
Djokovic, recluido desde este sábado en un hotel de Melbourne, aseguró estar “profundamente decepcionado” por este revés.
¿Qué más se le puede imponer al mejor tenista del mundo?
A Djokovic, de 34 años de edad, se le podría prohibir regresar al país durante tres años.
¿Cuándo cobró fuerza anticipada esta decisión judicial?
El viernes, cuando el ministro de Inmigración, Alex Hawke, en uso de sus atribuciones canceló el visado del jugador “por motivos sanitarios y del mantenimiento del orden”.
Djokovic se encuentra en Australia desde el 5 de enero, día a día ha sido el blanco de debate y de titulares periódicos en todo el mundo.
