El Tribunal de Sentencia de Villarrica, presidido por el magistrado Julio Alfonso e integrado por Porfirio Martínez y Víctor Ortigoza, absolvió a Gregorio Ramón “Papo” Morales en una de las causas que afronta por intento de homicidio doloso y otros.
El hombre fue denunciado por Antonio Talavera, expeón de la estancia familia de Morales. El hecho habría ocurrido en el distrito de Iturbe, Guairá y se viralizó en junio de 2018, momento en cuál la Fiscalía lo acusó de los hechos punibles de coacción grave, tentativa de homicidio doloso y violación de la ley de armas.
Reportan que el Tribunal no coincidió la carátula de la Fiscalía la tentativa de homicidio, cuya pena privativa de libertad es mayor a 20 años, por lo que solo fue sentenciaron por coacción grave, que conlleva una pena de 2 años de cárcel con oportunidad de salir procesal.
Así también, los jueces ordenaron que Morales se someta a un tratamiento durante dos años a rehabilitación de las drogas, debido a su supuesta adicción a la cocaína.
El Ministerio Público adelantó que apelará dicho fallo y pedirá la anulación del juicio para que se inicie uno nuevo, dónde el material audiovisual en el cual apuntó al denunciante con un arma de fuego sea considerado.
Morales también afronta otra causa por el homicidio del joven Robert Marín, registrado en noviembre del 2020.
