Por la cifra de US$ 5.500.000 los padres del niño Renato, quien falleció el 20 de agosto de 2019, en el Sanatorio Migone por una presunta negligencia médica, demandan al nosocomio en concepto de indemnización de daños y perjuicios. Hasta el momento ninguna autoridad fue imputada.
La demanda de indemnización de daños y perjuicios por responsabilidad extracontractual contra el Sanatorio Migone Battilana por la presunta negligencia médica fue promovida el 30 de julio de 2021 por los padres de Renato: los señores Carlos Federico Rojas Romero y Macarena Talavera Angulo, por medio de los abogados Juan Martín Barba, Guillermo Gómez Zotti y Rodrigo Cuevas Rolón.
“La muerte de Renato se debe a acciones y omisiones de los dependientes de la demandada, por lo cual este daño específicamente es antijurídico. De todo el relatorio de hechos, se da cuenta las conductas omisivas y negativas en las que incurrieron los profesionales médicos dependientes de la demandada, por lo cual actuaron negligentemente y omitieron imprimir su entender científico con la mayor diligencia que ameritaba el caso, causando un daño que no tiene causa de justificación legítima, por lo cual debe ser indemnizado”, refiere parte de la demanda entablada por los padres del niño fallecido.
“El Sanatorio Migone contrató a la Dra. Laura Sena a principio del año 2019 para que se desempeñe como médico especialista en Pediatría, sin que aún tenga el título habilitante para el efecto, es decir, que la demandada pese a tener conocimiento de inhabilitación de la Dra. Laura Sena para la especialidad de Pediatría, aún así la contrató, hecho que lógicamente concluyó meses después con el triste desenlace…”, se lee en otra parte del escrito de demanda.
Las reclamaciones
Como daño emergente, los demandantes solicitan G. 5.225.000, consistente en los gastos de servicios de sepelio del niño Renato.
Como lucro cesante y pérdida de chance, se calcula que el niño podría haber obtenido la mitad de los ingresos de sus padres que se calculó en unos G. 620.130.930. De la expectativa de ingresos se calculó que por 52 años de vida laboral útil, desde los 18 hasta los 70 años, la posibilidad de ingreso sería de unos G. 32.246.808.360.
En concepto de daño moral, que se tiene en cuenta por la muerte injusta, negligente y el antijurídico actuar de la demandada, se pide al juzgado que establezca el 10% de lo solicitado en los rubros anteriores para cada progenitor, totalizando entre ambos el 20% de dichos conceptos, lo que ascendería a la suma de G. 6.449.391.672.
Siendo así el total reclamado G. 38.696.170.032. A esta suma se debe agregar los intereses correspondientes desde el día del hecho.
El hecho
El 20 de agosto de 2019, la Sra. Macarena Talavera acudió al servicio de urgencias del Sanatorio Migone llevando a su hijo Renato de dos años de edad. Ingresó a las 8:11 aproximadamente, en compañía de la que fuera su niñera, la Sra. Mirna López, y la abuela materna, la Sra. Rosa Angulo, a los efectos de que el mismo sea atendido por un cuadro de gripe y fiebre.
Al llegar al sanatorio fueron atendidos por la Dra Laura Sena, constatando que el niño tenía 39° de temperatura, quien indicó la aplicación de un supositorio y de esa manera la temperatura descendió a 38,5° y luego a 37,3°.
La Dra. Sena prescribió dieta liviana con leche, pero seguidamente el pequeño empezó a vomitar catarro con estrías de sangre. Luego se quedó dormido y todo parecía que estaba bien. La médica dijo a los familiares que Renato se encontraba bien y que estaba con un cuadro de bronquitis y que luego de estar los resultados laboratoriales le darían el alta médica.
Unos instantes después, el niño empezó a desmejorar, se puso pálido y sus labios morados, por lo que la madre y la niñera empezaron a gritar, solicitando ayuda de los médicos. Un enfermero les dijo “ya viene la doctora” y se retiró. Otra enfermera se acercó al niño, le inspeccionó y dijo que sus signos vitales estaban bien y se retiró.
Luego de unos 10 minutos, Renato empezó a convulsionar, pero no recibió asistencia médica. La niñera vio que el niño no podía respirar y pidió a gritos que le coloquen oxígeno. Ante esta situación, la madre también pidió auxilio a los médicos María de Fátima Bastos Ausfeld, José Manuel Ovando y Óscar Feliciano Cabrera, pero ninguno de los galenos se acercó a inspeccionar el estado de salud del niño, incluso se llegaron a burlar de la desesperación de la madre.
Luego de otros 45 minutos, la Dra. Julia Acuña le comunicó a la Sra. Macarena Talavera que su hijo Renato había fallecido.
Causa penal
Tras el fallecimiento del niño Renato, el Ministerio Público abrió un proceso penal caratulado: “María de Fátima Bastos Ausfeld, José Manuel Ovando, Óscar Feliciano Cabrera Román y Laura Sena Figueredo s/ omisión de auxilio, homicidio culposo y abandono”.