Un grupo de siete concejales de la Municipalidad de Puerto Casado, en Alto Paraguay, solicitaron a la Cámara de Diputados y a la Contraloría General de la República (CGR), la auditoría de la administración del actual intendente Hilario Adorno, a quién acusan de supuesta estafa y lesión de confianza por malversación de fondos.
Las presuntas irregularidades denunciadas incluyen también la emisión de cheques sin fondos para pagar a proveedores, la falta de pagos de salarios a funcionarios y la adquisición de bienes personales con aparentes recursos municipales.
“Varios concejales de Puerto Casado acercaron denuncias concretas sobre situaciones sumamente lamentables dadas ya a los 10 meses de asunción del cargo del intendente Adorno (…) Solicito al Contralor General de la República, Camilo Benítez, en quien tenemos extremos confianza, que haga justicia y que ordene la fiscalización especial inmediata solicitada por los fiscales sobre las desviaciones de dinero que están siendo denunciadas”, dijo ayer en sesión la diputada de Patria Querida, Rocío Vallejo, quién se hizo eco de las graves acusaciones contra el líder municipal.
El cuestionado intendente es hermano de José Domingo Adorno, exdiputado y actual gobernador del departamento de Alto Paraguay, quién también fue denunciado en el mes de junio por los hechos punibles de lesión de confianza, cobro indebido de honorarios, y malversación de fondos públicos.
